Existen diferentes estrategias para llevar a cabo la vigilancia epidemiológica:
Vigilancia epidemiológica de la morbilidad:
La notificación semanal se lleva a cabo a partir de la detección de casos nuevos de las enfermedades en las Unidades Primarias Generadoras de Datos (UPGD). Dispone de un procedimiento de registro con la aplicación de formatos homogéneos que se remiten semanalmente a los niveles inmediatos superiores, hasta su integración al nivel nacional.
Vigilancia epidemiológica de base comunitaria:
La participación de la comunidad como estrategia institucional es la forma más viable para responder a las necesidades de salud e identificar los problemas prioritarios en este ámbito. La incorporación de personal comunitario en los programas de salud constituye una tendencia mundial que promueve la OMS y los gobiernos de diferentes países del mundo. La información epidemiológica se capta y se notifica por medio de los promotores voluntarios previamente capacitados.
Diagnóstico de laboratorio para la vigilancia epidemiológica:
En apoyo a la vigilancia epidemiológica, el laboratorio se constituye como una de las herramientas de mayor trascendencia para el diagnóstico de enfermedades; por tal razón, es imprescindible que exista una estrecha coordinación entre las áreas de epidemiología y laboratorio para que la información de los casos humanos probables y confirmados, así como de muestras ambientales, fluya ágil y oportunamente.